La consejera de Economía entregando los presupuestos de 2010 a la presidenta del Parlamento andaluzEste miércoles, el pleno del Parlamento andaluz acoge el debate a la totalidad del proyecto de Ley de Presupuestos de la comunidad para 2010. Se trata del último trámite que tienen que superar tras ser aprobado en Consejo de Gobierno el pasado 27 de octubre.
Son los presupuestos que un gobierno socialista debía hacer en una coyuntura de crisis internacional como la que estamos viviendo.
Cada partido político afronta la realidad de acuerdo con sus principios y valores. Principios y valores socialistas que se ven reflejados en unos presupuestos que defiende una política de inversión y gasto que mantiene y contribuye a mejorar la protección social que tanto nos ha costado conseguir en nuestro país. También, son unos presupuestos que priorizan la inversión productiva y la creación de empleo.
Para los socialistas es importante salir de esta crisis reforzados, tanto en el plano social como económico. Sin dejar a nadie en la cuneta y abandonado a su suerte, los presupuestos sientan nuevas bases de desarrollo y apuestan por un nuevo modelo económico a largo plazo que prime la sostenibilidad energética y medioambientalmente. Es decir, un modelo que permita crear empleo de calidad y no deslocalizable. Para ello, se ha creado un Fondo de Economía Sostenible para Andalucía dotado con 50 millones de euros.
También hacen una apuesta clara por la educación y la formación, ya que para nuestro partido político el principal potencial que tiene Andalucía son sus hombres y mujeres. El cambio pasa necesariamente por el fortalecimiento de nuestro capital humano, del que depende la competitividad de nuestra economía.
En cuanto a la política de promoción de empleo, los presupuestos para el 2010 dedican un importante volumen de recursos, en concreto 1.520.4 millones de euros, lo que supone un incremento del 9.2% respecto a 2009.
Con esta partida presupuestaría se refuerza las políticas activas para la reinserción laboral de desempleados, al mismo tiempo que se centran en sectores estratégicos de elevado potencial de crecimiento y creación de empleo de calidad y no deslocalizable.
En definitiva, son unos presupuestos muy pensados, extremadamente austeros, pero que garantizan el transito de la crisis sin hipotecar el futuro. Nos permitirá conquistarlo.
Son los presupuestos que un gobierno socialista debía hacer en una coyuntura de crisis internacional como la que estamos viviendo.
Cada partido político afronta la realidad de acuerdo con sus principios y valores. Principios y valores socialistas que se ven reflejados en unos presupuestos que defiende una política de inversión y gasto que mantiene y contribuye a mejorar la protección social que tanto nos ha costado conseguir en nuestro país. También, son unos presupuestos que priorizan la inversión productiva y la creación de empleo.
Para los socialistas es importante salir de esta crisis reforzados, tanto en el plano social como económico. Sin dejar a nadie en la cuneta y abandonado a su suerte, los presupuestos sientan nuevas bases de desarrollo y apuestan por un nuevo modelo económico a largo plazo que prime la sostenibilidad energética y medioambientalmente. Es decir, un modelo que permita crear empleo de calidad y no deslocalizable. Para ello, se ha creado un Fondo de Economía Sostenible para Andalucía dotado con 50 millones de euros.
También hacen una apuesta clara por la educación y la formación, ya que para nuestro partido político el principal potencial que tiene Andalucía son sus hombres y mujeres. El cambio pasa necesariamente por el fortalecimiento de nuestro capital humano, del que depende la competitividad de nuestra economía.
En cuanto a la política de promoción de empleo, los presupuestos para el 2010 dedican un importante volumen de recursos, en concreto 1.520.4 millones de euros, lo que supone un incremento del 9.2% respecto a 2009.
Con esta partida presupuestaría se refuerza las políticas activas para la reinserción laboral de desempleados, al mismo tiempo que se centran en sectores estratégicos de elevado potencial de crecimiento y creación de empleo de calidad y no deslocalizable.
En definitiva, son unos presupuestos muy pensados, extremadamente austeros, pero que garantizan el transito de la crisis sin hipotecar el futuro. Nos permitirá conquistarlo.
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