El pasado 24 de septiembre, el Pleno de Parlamento andaluz aprobó una proposición no de ley del PSOE en la que se insta a la Junta a que constituya, mediante el instrumento jurídico oportuno, una comisión técnica que haga los trabajos previos a la elaboración del anteproyecto de Ley del Trabajo Autónomo en Andalucía.
La propuesta de la creación de esta comisión viene fundamentada por la necesidad de determinar qué espacios de regulación son los que, desde las competencias autonómicas, se pueden afrontar. No se debe obviar que se trata de un tema que por condicionantes constitucionales se encuentra sometido a competencias exclusivas del Estado.
Es necesario delimitar qué materias son susceptibles de regulación desde las autonomías y cuales, de las pertenecientes al estatuto estatal del trabajador autónomo, pueden ser complementadas. De ahí que se inste a la Junta a la constitución -de manera inmediata- de una comisión de expertos para que estudie y elabore una propuesta de estructura y tratamiento de las distintas materias a incluir en el anteproyecto de Ley de Trabajo Autónomo de Andalucía.
Para el PSOE de Andalucía es importante la participación de las organizaciones de autónomos en la elaboración del anteproyecto, ya que se quiere que sea una ley consensuada con los legítimos representantes de este colectivo y que recoja todos los elementos de promoción del trabajo autónomo. Por eso, se pide que los representantes de los intereses del sector sean un cauce privilegiado en la interlocución por parte de la Consejería de Empleo.
Tiene que ser una ley que mire al futuro, que incida necesariamente en lo que haya de ser el futuro. No debe ser una alternativa transitoria para combatir el desempleo, sino constituirse en el sustento de la actividad de estos profesionales cuyo futuro determina buena parte de la riqueza productiva sostenible de nuestra comunidad autónoma.
Para los socialistas el autoempleo, no sólo es una fuente generadora de empleo, sino de riqueza y bienestar social; de ahí el rigor y seriedad a la hora de afrontar el desarrollo de una ley que regule la figura del autoempleo en su concepto más amplio, superando la visión limitada que en general se tenía de estos profesionales.
La creación de esta ley no va a restar esfuerzo ni apoyo al colectivo de autónomos. De hecho, el primer punto de la proposición no de ley demandó a la Junta que CONTINÚE, y lo pongo con mayúsculas, con el desarrollo de los instrumentos y medidas de apoyo para la promoción del autoempleo en Andalucía, al objeto de seguir paliando la coyuntura que están atravesando por motivos de la crisis.
No quiero pasar por alto, además de que fue agradecida por todos los grupos que tienen representación en el Parlamento, la presencia de los autónomos en el Pleno del Parlamento en la proposición de ley a favor del autoempleo, quienes aplauden la iniciativa del PSOE de Andalucía.
Desde hace más de un año venimos trabajando, codo con codo, con ellos ya que somos conscientes de la difícil situación que están afrontando con motivo de la crisis; a la vez que conocedores de la suma importancia y el peso específico que constituyen en el desarrollo económico y la cohesión territorial de Andalucía.
La propuesta de la creación de esta comisión viene fundamentada por la necesidad de determinar qué espacios de regulación son los que, desde las competencias autonómicas, se pueden afrontar. No se debe obviar que se trata de un tema que por condicionantes constitucionales se encuentra sometido a competencias exclusivas del Estado.
Es necesario delimitar qué materias son susceptibles de regulación desde las autonomías y cuales, de las pertenecientes al estatuto estatal del trabajador autónomo, pueden ser complementadas. De ahí que se inste a la Junta a la constitución -de manera inmediata- de una comisión de expertos para que estudie y elabore una propuesta de estructura y tratamiento de las distintas materias a incluir en el anteproyecto de Ley de Trabajo Autónomo de Andalucía.
Para el PSOE de Andalucía es importante la participación de las organizaciones de autónomos en la elaboración del anteproyecto, ya que se quiere que sea una ley consensuada con los legítimos representantes de este colectivo y que recoja todos los elementos de promoción del trabajo autónomo. Por eso, se pide que los representantes de los intereses del sector sean un cauce privilegiado en la interlocución por parte de la Consejería de Empleo.
Tiene que ser una ley que mire al futuro, que incida necesariamente en lo que haya de ser el futuro. No debe ser una alternativa transitoria para combatir el desempleo, sino constituirse en el sustento de la actividad de estos profesionales cuyo futuro determina buena parte de la riqueza productiva sostenible de nuestra comunidad autónoma.
Para los socialistas el autoempleo, no sólo es una fuente generadora de empleo, sino de riqueza y bienestar social; de ahí el rigor y seriedad a la hora de afrontar el desarrollo de una ley que regule la figura del autoempleo en su concepto más amplio, superando la visión limitada que en general se tenía de estos profesionales.
La creación de esta ley no va a restar esfuerzo ni apoyo al colectivo de autónomos. De hecho, el primer punto de la proposición no de ley demandó a la Junta que CONTINÚE, y lo pongo con mayúsculas, con el desarrollo de los instrumentos y medidas de apoyo para la promoción del autoempleo en Andalucía, al objeto de seguir paliando la coyuntura que están atravesando por motivos de la crisis.
No quiero pasar por alto, además de que fue agradecida por todos los grupos que tienen representación en el Parlamento, la presencia de los autónomos en el Pleno del Parlamento en la proposición de ley a favor del autoempleo, quienes aplauden la iniciativa del PSOE de Andalucía.
Desde hace más de un año venimos trabajando, codo con codo, con ellos ya que somos conscientes de la difícil situación que están afrontando con motivo de la crisis; a la vez que conocedores de la suma importancia y el peso específico que constituyen en el desarrollo económico y la cohesión territorial de Andalucía.
Fernando Villén
